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| Kohoutek Velasco |
Hay hombres y mujeres en cada rincón de este planeta que pretenden brindarnos una zona segura, cómoda y confortable donde nada sale mal; donde no vale la pena hacer pregunta alguna si ya se tienen todas las respuestas. Estas personas, lejos de sus intenciones, nos ofrecen una alternativa a nuestra innata capacidad para fracasar, una donde no importa que hagas o que dejes de hacer pues ya está todo solucionado.
Es una alternativa tentadora ¿verdad? el poco a poco ir reduciendo el porcentaje de “error” en cualquiera de nuestras decisiones, sea en lo individual o en lo económico. Yo sé que sí, y estoy seguro que muchos, en buena parte del mundo, así lo han creído, lo han experimentado y lo han defendido.
Lo cierto es que las cosas no funcionan así, para nada, no hay nadie en esta vida que tenga todas las soluciones, ni todas las respuestas o todas las preguntas… Habrá quien tenga todas las intenciones, tal vez, pero eso no es suficiente y no podemos pretender que lo es, para eso está la historia, para recordarnos los horrores de confiar en intenciones y no en nosotros.
Y es algo tan progresivo, tan lento y tan aparentemente correcto, que es complicado de ignorar
Por eso quiero hacerte la invitación a que no cedas, a que no des un paso atrás cuando te hagan el ofrecimiento de renunciar a tus errores y sus consecuencias, porque esa es la única manera existente para progresar y aprender.
No cedas cuando te digan que eres igual a los demás, pues para bien o para mal no lo eres, y, a fin de cuentas, esas diferencias son las que nos permiten ser prósperos y felices; no todos queremos lo mismo, ni vamos a quererlo siempre.
No cedas cuando te digan que es lo que mereces y que es lo que no. Solo tú sabes que quieres y cuanto vas a trabajar para obtenerlo, no las consideraciones de un tercero.
No cedas cuando quieran decidir por ti, cuando alguien que se hacer llamar “el más sabio” te diga a donde debes estudiar, o que debes ver o donde debes estar y a qué hora y con quienes. Nadie mejor que tú sabe lo que quiere.
No cedas cuando se quieran hacer dueños de tu trabajo y de lo que te pertenece, sea tu ser, tu dignidad o tus motivaciones; sigue adelante aun cuando todo mundo te diga lo contrario.
En fin, no cedas, quédate ahí para decirles: “No, soy libre.”
“Kohoutek Velasco, miembro fundador de México Libertario. Ni de izquierda ni de derecha; Simplemente lógico. Activista y escritor liberal.”
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