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| Josué Segura |
En los últimos días ha estado al aire el nombre Carmen Aristegui, con comentarios tanto de aprobación como de desaprobación, a título personal puedo decir que no me gusta y mucho menos le profeso credibilidad en su periodismo.
Cabe mencionar que no es la única periodista de izquierda que siente el “derecho” de desacreditar a quien no apoye a su líder, AMLO, pero eso sí, en contraparte, no fuera que tocaran a alguno de sus allegados o líderes porque entonces hablarían de censura o guerra sucia.
En fin, para mí para que un buen periodista sea tal, tiene que tener 4 cualidades fundamentales:
1) Imparcialidad,
2) Objetividad,
3) Profesionalidad,
4) Veracidad.
Obteniendo así una equidad de contenido, el caso es que faltando a la ética y al rigor periodístico, Aristegui, se ha dedicado a falsear notas y aprovechar filtraciones de políticos muy afines a ella, pondré 2 claros ejemplos:
1) Tachó de “borracho” al entonces presidente Felipe Calderón, el problema no fue haberle calificado como tal, sino carecer de pruebas. En ese entonces por redes sociales le habían insinuado un grave problema de alcoholismo.
2) Años después acusó a Cuauhtémoc Gutiérrez de la Torre de haber tejido una red de prostitución al interior del PRI, basada en un supuesto reportaje de una de sus reporteras, la cual, por cierto, nadie sabía si existía. A pesar de que luego del paso del tiempo, ninguna autoridad encontró prueba alguna de tal acusación, la periodista siguió atacando al político PRIísta, quien, sabemos, supuestamente iba a cometer suicidio por el descrédito social provocado.
No obstante quisiera recordar, también, otro de sus grandes problemas, el acato a las órdenes laborales. En un trabajo anterior a MVS Radio, la comunicadora renunció porque se negó a acatar las directrices de la empresa y someterse a los estándares del resto de sus compañeros, se negaba a recibir ya no órdenes, sino ni siquiera sugerencias. Al final, Aristegui llegó a MVS, donde volvió a repetir la misma historia, entonces me pregunto, ¿qué, acaso el verdadero oficio de Carmen Aristegui es hacerse la víctima? Porque eso sí, nadie, absolutamente nadie, responsabilizó a la única culpable: Aristegui.
Me es indispensable de la misma forma, tocar el tema del que se repite interminablemente la palabra, “censura”, estando en completo desacuerdo, porque si alguien se ha encargado de golpear a diestra y siniestra a gobiernos del PAN o PRI ha sido ella misma, sin que nadie le tape el micrófono.
No puedo negar que Aristegui tiene una larga y exitosa carrera y es reconocida por mucha gente como una de las mejores comunicadoras, pero carece de esas 4 cualidades, razón por la cual, reto a cualquier persona me dé una nota, una sola que esté en contra de AMLO o la izquierda que él mismo ha creado.
¿No creen que es totalmente burdo y contradictorio que la mayoría de los izquierdistas pro AMLO rechacen a “periodistas” como Joaquín López Dóriga que oculta la corrupción del PRI pero eso sí, alaben y apoyen a Aristegui, que también oculta la corrupción de la izquierda?
Siendo honesto no me viene a la mente que haya habido un gobierno tan golpeado en medios de comunicación como el de Peña Nieto ¿No será que estamos viendo una lucha de poderes? Para ver ¿Quién sale victorioso?
“Josué Segura, miembro fundador de México Libertario, estudiante de Derecho en la UNAM, colaborador en publicaciones, crítico político liberal.”
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